A septiembre de 2016, se estimaba en nuestro país un total de 112 millones 335 mil 538 personas.
De esa cantidad, más de 10.5 millones tenían 60 años de edad o más.
En los años 70´s, las proyecciones de población apuntaba a un rápido envejecimiento de la población, aunado a la disminución de la tasa de crecimiento poblacional, y a la prolongación de la vida.
Con el interés de algunos notables ciudadanos, el evidente interés y apoyo político, se creó en 1979, el Instituto Nacional de la Senectud (INSEN), organismo público descentralizado, dotado de personalidad jurídica y patrimonio propio, con el objetivo de proteger, ayudar, atender y orientar a la vejez mexicana, estudiar sus problemas y lograr soluciones adecuadas.
En enero de 2002, el INSEN cambia de nombre y se instituye como el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (INAPAM).
El objetivo del INAPAM es el de coordinar, apoyar, fomentar, vigilar y evaluar las acciones públicas, estrategias y programas, y promover el desarrollo integral de las personas adultas mayores, mediante el empleo, la ocupación, asistencia y oportunidades que coadyuven, a mejorar su calidad de vida.
Sin embargo, el envejecimiento acelerado de sociedad, representa uno de los mayores retos para el país, en múltiples aspectos, pero en especial, para el sistema de pensiones pues muchos de nuestros adultos mayores no recibirán los beneficios de una pensión y pasarán su vejez dependiendo de los hijos, si es que los hijos le salieron buenos y responsables; si no es así, las condiciones serán de gran precariedad.
Si llegan a tener la fortuna de recibir una pensión, el detalle está en ¿de cuánto ésta será?.
Recuerde que más del 87% de la población pensionada, tiene un ingreso de entre uno y dos salarios mínimos; así que, como puede apreciar, el futuro para este segmento de pensionados, es muy incierto.
¿Qué ha propiciado la prolongación de la vida?
Indudablemente que una mejor alimentación, el avance de la ciencia médica y la tecnología, entre otros, son los factores que han impulsado la prolongación de la esperanza de vida de los mexicanos.
Como referencia, en la década de los 50´s, la esperanza de vida era de 34 años; para el año 2000, fue de 74 años y se estima que, para el 2050, será aún mucho mayor.
Por su parte, el Consejo Nacional de Población (CONAPO), refiere que, la esperanza de vida de las mujeres en el año 2011, fue de 77.9 años, y de 73, para los hombres; para el año 2050, será de 83.6 y 79.0, respectivamente.
A finales del 1980, el INAPAM dio inicio a la inscripción, registro e incorporación de toda persona que cumpliera 60 años de edad o más.
Al afiliarse al INAPAM, se reciben una credencial con la que se obtienen significativos descuentos en el pago de servicios, derechos y compra de algunos bienes.
Ubique los requisitos para obtener su credencial INAPAM ingresando en la siguiente liga: https://www.gob.mx/inapam/acciones-y-programas/tarjeta-inapam-conoce-los-requisitos-para-obtener-la-tarjeta-inapam
Además, el Instituto es un fuerte impulsor de actividades culturales, recreativas y manualidades; la credencial otorga, comúnmente se acepta como medio de identificación.
La Ley de los Derechos de las Personas Adultas Mayores, promulgada en el año 2002, establece en su artículo 5, de manera enunciativa más no limitativa, que dicha Ley tiene por objeto, garantizar a las personas adultas mayores su derecho a la integridad, dignidad y preferencia; a la certeza jurídica, a la salud, la alimentación y la familia; a la educación y al trabajo; a la asistencia social, a la participación y a la denuncia popular.
Así que, cumplido los 60, a inscribirse al INSEN y a disfrutar de sus beneficios.
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