Así como lo están viendo, el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, ha declarado que los ex-presidentes de México, tendrán que elegir entre una pensión del ISSSTE o una del Programa de Pensión para Adultos Mayores.
La pensión del ISSSTE les corresponderá de cumplir con los requisitos indicados en la nueva Ley, o en lo establecido en el Transitorio Décimo, según corresponda.
De no cumplir con el requisito en años de servicio, los ex-presidentes, conforme a la Ley, deben de recibir la negativa de concesión de pensión y por consecuencia, recibir los recursos que les corresponda.
Al no tener derecho a pensión, por no cumplir los requisitos previstos en la Ley, podrán entonces aspirar a una otorgada por el Programa de Pensión para Adultos Mayores.
Bien decía Porfirio Díaz: «Al amigo, la mano y la Ley; a los enemigos, con toda la mano y con toda la Ley»
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